¿Cómo mantengo mis cuchillos afilados?
Mantener nuestros cuchillos afilados es algo que no siempre hacemos y que es muy importante: nos facilitará mucho el trabajo y aunque no lo parezca, con un cuchillo mellado es mucho más fácil hacerse daño, ya que debemos hacer tanta fuerza que podemos lastimarnos las articulaciones y fácilmente se nos puede escapar y golpearnos. Cuando está bien afilado, la resistencia que sufre es muy baja, por lo que no daña la forma estructural del alimento y mantendrá las propiedades alimentarias del producto óptimas durante más tiempo. Además, resultará mucho más sencillo y productivo llevar a cabo grandes elaboraciones.
En Cookiru somos la cuarta generación de afiladores de cuchillos. Podemos detectar los aceros de calidad muy fácilmente y solo trabajamos con aquellos que comercializan un producto que supera nuestras expectativas.
La piedra de afilar, un arte ancestral
El Afilado con piedra es la práctica más antigua ligada a este tipo de herramientas. Se han encontrado cuchillos desde los orígenes de los humanos, en la edad de piedra, y con ellos, diferentes formas de afilarlos. A lo largo de las generaciones los individuos han mejorado los materiales de los que estaban hechos tanto los cuchillos como las piedras y perfeccionado el movimiento para crear la abrasión que afila nuestro cuchillo, dando lugar a verdaderos maestros artesanos del afilado por todo el mundo.
Las piedras de afilar se diferencian por la densidad del grano, que viene marcado con un valor numérico. Cuanto más bajo es el valor de gramaje, más severo será el impacto sobre la hoja. En cambio, si el número de gramajes es alto, la piedra es más densa y, por lo tanto, más fina y perfecta para acabados. Al ser un proceso lento y extremadamente habilidoso, encontrar un afilador de cuchillos con piedra es extremadamente inusual. Por ello, os alentamos a probar esta disciplina en vuestras casas con las mejores herramientas.
Tipos de piedra de afilar
Los tipos dependen del uso que le queramos dar: vaciar, afilar o afinar y pulir, y podremos decidir que piedra de afilar comprar.
- Para vaciar: normalmente las utilizaremos para dar forma a la hoja. Son las que más material van a arrancar de las mismas y las que tienen un gramaje más bajo: desde 300 a 600 gramos.
- Afilado y afinado: su poder de abrasión es menor, por lo que su numeración será más alta, normalmente desde los 600 a 4000 gramos. Nos vienen perfectas para dar filo y empezar a rematar el brillo de la hoja.
- Piedras para pulir: son las que tienen el gramaje más denso, desde los 4000 a los 6000 gramos y son perfectas para dejar un acabado exquisito en nuestro cuchillo.
Afilar en piedra es un trabajo arduo. Normalmente siempre aconsejamos empezar con una de bajo gramaje, pues con menos esfuerzo obtendrás un gran resultado. Si luego decides que quieres subir en calidad y perfección, puedes pasar a la siguiente categoría de piedra.
Todas nuestras piedras incluyen dos gramajes distintos, uno por cada cara, especificados con su valor de gramaje. Ofrecen un servicio 2×1: pues puedes afilar con un grano 3000 y pulir con uno 6000. Todo son ventajas para ponerse manos a la obra y que todos tus cuchillos corten como el primer día.
Tutorial de cómo usar una piedra de afilar
Es básico entender que con prisas no llegaremos a ninguna parte: el afilado con piedra es considerado por muchos como un tipo de meditación y se utiliza para dejar la mente en blanco y ser uno con el cuchillo. Es imprescindible dedicarle unos minutos cada día a nuestro compañero para poder optimizar el corte y no sentir frustración.
Con esto en mente, procederemos a buscar la piedra de vaciado de 300 a 1000 gramos y la colocaremos en una superficie completamente plana y buscando algo que la calce para evitar que se nos mueva. Muchas piedras vienen con un soporte de sujeción, pero si no disponemos, debemos buscar un apoyo vertical. A partir de ahí no es recomendable hundir la piedra bajo el agua, aplicarle un chorro de agua a la cara que utilizaremos y humedeciéndola constantemente durante el afilado. El agua nos ayudará a generar fricción, refrigerará la hoja y se llevará las impurezas que surjan. Con estos consejos vosotros mismos seréis unos afiladores de cuchillos excepcionales.
Humedecer la piedra
Pondremos la piedra dentro de un recipiente con agua y la cubriremos totalmente durante 10 minutos, hasta que las burbujas de aire que desprende desaparezcan. Eso significa que la piedra ya habrá filtrado el agua que necesita. Igualmente durante el afilado deberemos mantener en todo momento una fina película de agua en su superficie para que esté siempre húmeda. Esto nos garantizará que se vaya soltando el grano de la piedra durante el proceso y nos proporcionará una correcta refrigeración del filo del cuchillo.
Buscar el ángulo

Buscaremos el ángulo más adecuado para afilar nuestro cuchillo. Normalmente suele ser entre 10 o 30 grados. Apoyaremos el filo de la hoja que queramos afilar sobre la piedra y nos ayudaremos con el pulgar y la yema de los dedos para marcar el ángulo. Al principio necesitaremos la ayuda de una cuña para apoyar el cuchillo en los ángulos correspondientes: nos la podemos hacer nosotros mismos con un trozo de madera y un marcador de ángulos (existen aplicaciones de móvil que te los determinan). Es importante que agarremos el mango del cuchillo firmemente con la mano. Podemos ayudarnos del pulgar de la mano que sujeta el mango para mantener la medida del ángulo de afilado así como colocar tres dedos de la otra mano sobre la hoja en vertical a la piedra. Esto nos permitirá fijar el ángulo durante los movimientos.
Los cuchillos occidentales y los orientales difieren un poco en el ángulo de afilado, por eso es importante que nos fijemos bien en los grados necesarios para cada uno de estos tipos de cuchillos, los cuchillos japoneses necesitan de unos 10 grados frente a los 25 normalmente utilizados en los europeos.
Afilado
A continuación empezaremos a afilar el cuchillo. Los movimientos deben ser en dirección vertical por toda la longitud de la piedra, acercando y alejando la hoja del cuerpo y ejerciendo una ligera presión en el movimiento de vuelta. Los movimientos deben ser calmados y sin apretar en exceso, simplemente acompañar. Es importante que cada movimiento cubra la totalidad de la hoja del cuchillo mientras mantenemos el mismo ángulo de afilado. Otra opción es afilar la hoja por tramos, en vez de pasarla entera de un solo movimiento. Repetiremos el proceso hasta que percibamos una fina rebaba, eso significa que la hoja ya está afilada.
Solo queda girar la hoja y afilar la otra cara del cuchillo. Es muy importante que realicemos el mismo número de movimientos en ambos lados y mantengamos el mismo ángulo para que nos quede un afilado simétrico.
Limpiar la hoja
Al finalizar, debemos enjuagar con cuidado el cuchillo y la piedra de afilar con agua. También podemos pulir las imperfecciones o pequeñas ralladuras ocasionadas por el proceso del afilado con una piedra de gramaje más denso (entre 4000 y 6000). Esto le dará un acabado más estético y brillante.
Si te preguntas como limpiar tu piedra de afilar no sufras, solo recuerda que el cuchillo debe estar limpio antes de trabajarlo en piedra porque si tiene restos de alimentos este le dará a la piedra una capa de grasa que nos ara ir mucho más lentos a la hora del afilado y no quedara perfecto. Si te ha pasado esto límpiala con agua caliente nunca con detergentes, enjuágala bien y más importante todavía sécala perfectamente a la sombra.
En Cookiru disponemos de todo tipo de piedras y nos convierte en el lugar donde comprar las piedras de afilar que necesites, si necesitas alguna que no aparece por aquí tampoco dudes en llamarnos.
Otro Tipo de Afilador de Cuchillos Manual
Con el tiempo el afilado se ha ido perfeccionando y amoldando a todas las necesidades que demanda un afilador de cuchillos, es por eso que han ido apareciendo otro tipo de herramientas con diferentes funcionalidades y usos, como son las chairas y los afiladores semiautomáticos
Chairas
Estas son las reinas de cualquier obrador de carne, pescadería o taller de costura. Son básicamente piedras de afilar de diferentes formas y con un mango ergonómico para sujetarlas de una manera mucho más cómoda. Su función es únicamente la de devolver al cuchillo el filo perfecto que se va perdiendo después de su uso. Normalmente, estarán imantadas y todo el residuo generado de la fricción con la hoja del cuchillo se quedará en la piedra. No es muy común ver a un afilador de cuchillos con estas herramientas, pues están pensadas para obradores y pescaderías. Pero, son realmente muy útiles y fáciles de utilizar.
- Mantenimiento: El uso indebido como lo es golpearlas, las romperá. Son utensilios resistentes, pero se pueden romper si se caen o los usamos para hacer palanca no debemos tocar la piedra con las manos, ya que la ensuciaremos rápidamente y no cumplirá con su función al 100%, no es necesario mojarlas más que cuando acabemos de usarlas y de vez en cuando si le dais mucho uso pasarle un paño limpio para quitar el residuo que genera el roce con la hoja.
- Uso: La teoría es sencilla, buscar un ángulo de unos 15 a 20 grados y avanzar por todo el filo del cuchillo. Aquí no tienes manera de calcular el ángulo pues la otra mano está sujetando el afilador, debemos más o menos visualizar el ángulo y trabajar el filo siempre igual, esto último es muy importante, no debéis cambiar el ángulo a no ser que creáis que lo podéis mejorar.
Afilador de cuchillos manual
Esta herramienta está pensada para aquellos que no desean aprender las habilidades de un afilador de cuchillos tradicional.
Él mismo marca el ángulo, entonces solo deberéis apoyar la hoja dentro de sus guías y mientras ejercéis un poco de presión moverlo por todo el filo del cuchillo con delicadeza. No hace falta apretar mucho, con un movimiento suave y repetitivo conseguiremos que nuestro filo vuelva a estar como nuevo. Con esta herramienta solo se consigue sacar filo, nunca vaciarás una hoja ni le darás forma.
Para conseguir afilar un cuchillo muy maltrecho, oxidado o completamente mellado, deberemos ponernos en contacto con un afilador de cuchillos profesional
Afilador Cuchillos en Granollers
Si en algún momento decides ponerte a nuestro servicio, descubrirás que no somos el típico afilador de cuchillos. Si es una herramienta de corte, muy probablemente la podemos afilar. Por supuesto, siempre hay excepciones. ¡Pero, nos encanta que nos pongáis a prueba!




También puedes echar un vistazo a nuestras herramientas para peluquería y barberías. Somos distribuidores de tijeras de peluquería, alicates de uñas, cutículas y todo tipo de herramientas de gran calidad. Por supuesto, también las afilamos todas.